Cuando desperté, observé la completa oscuridad, a mí alrededor, había una capa de una densa niebla que no me dejaba ver mis propias manos. —Así que conseguiste llegar, enhorabuena. Has sido el primer ser vivo en llegar “con vida” hasta mí—. No entendí bien la parte final de su discurso, ¿Acaso estaré muerta?, me siento demasiado confusa. —Veo la confusión en tus ojos, así que aclararé tu mente, gracias a mí aún te mantienes viva, pero tanto eso como el futuro de la humanidad, depende de lo que respondas a tres preguntas que te voy a formular- Aún seguía sin ver nada, siquiera era consciente de donde provenía esa voz, aunque sinceramente también dudo que a estas alturas tenga otra opción que aceptar su propuesta, —Está bien— le respondí dubitativa, —por el futuro de mi pueblo responderé a tus tres preguntas- —De acuerdo— dijo Raskhun, —comencemos Tessa, ¿Crees que la humanidad se merece una segunda oportunidad?

Merath Kaiyo


—Tu pregunta me desconcierta. Como Guardián del Universo sabes muy bien que nunca puedes destruir nada totalmente. Nada se destruye, todo se transforma. Los humanos siempre encontramos la forma de intentarlo otra vez. Las segundas oportunidades son indispensables para evolucionar. Piensa en la Mitología: el Ave Fénix, Ulises, Galatea. —Galatea era una simple nereida, una diosa menor, dijo Raskhun. —Esa es una visión muy limitante. Sabes que Ovidio se inspiró en ella para darle una segunda oportunidad en su obra, que, curiosamente, ha atravesado espacio y tiempo hasta llegar a la literatura y el cine con el musical de B. Shaw Pigmalion. Fue un gran éxito ver que una vendedora de flores que no sabía hablar llegó a convertirse en una elegante dama. —Raskunn miró a Tessa con desilusión: los ejemplos que me das son mitos, creaciones del hombre para satisfacer su ego. No me convencen. —Los mitos están inspirados en la realidad y tienen una carga simbólica muy importante, pero te daré un ejemplo real: Marie Curie. Tú sabes los retos que tuvo que superar para conseguir su sueño y poder estudiar en la Sorbona. Gracias a su tesón y a sus segundas oportunidades nos ha dejado un legado de incalculable valor. —Marie tuvo suerte de tener un marido comprensivo, dijo Raskunn. —Esa es la segunda oportunidad que necesita mi civilización, que hombres y mujeres trabajemos juntos, pero de verdad, para que tu luz brille en todos los rincones y sigamos evolucionando. Las mujeres tenemos mucho que aportar a la evolución humana, pero solo le has dado oportunidades a los hombres ¿Acaso nos tienes miedo? Somos pacíficas y luchadoras a la vez, déjanos, demostrártelo. —Aceptaré tu primera respuesta. Ahora esmérate en responder a la segunda pregunta. Dime Tessa, ¿Cuál es tu sueño?

Karma de Carmen


Sin duda mi sueño es encontrar un planeta habitable para la humanidad. – No es la respuesta. Esa es la misión por la que te embarcaste en tu nave, pero no tu anhelo más profundo. Dime ¿Cuál es? Tessa exhaló un suspiro largo y profundo que usó como un dique para contener el llanto. – Lo que deseo desde lo más profundo de mi alma es volver a ver a mis amigos, a mi pareja, en fin a mi familia. – ¿Acaso la humanidad no es tu familia también? ¿Crees que no vale la pena el sacrificio? – No quedaba otra opción, aunque sabía que era una travesía sin un destino cierto, ni garantías. Solo me acompañan estos recuerdos prófugos que se agolpan para salir. Extraño mi vida tal y como era. Ningún ser humano está preparado para afrontar tanta presencia y ausencia simultáneamente. No es un pecado añorar lo que es de uno. – Eso era lo que necesitaba escuchar Tessa. La humanidad todavía cree que todo lo de la existencia le pertenece, colonizan y sustraen. Se ven a sí mismos como individuos cuyos actos no afectan al resto y a pesar de que fueron enviados numerosos avatares siempre lograron distorsionar su mensaje y caminar por la misma senda errónea. – Sí lo sé, todo está enlazado cuánticamente y cada acto tiene un efecto con repercusiones inimaginables. Tienes que reconocer que muchos nos unimos para salvaguardar a la humanidad o lo que quede de ella. – Es cierto, cuando la situación los apremió algunos lo hicieron. Pero seguramente si se les concede otro paraíso como su planeta repetirán la historia. Todavía te queda una pregunta y una última respuesta para abogar por tu raza.

Tessa ¿Qué estarías dispuesta a hacer para salvarlos?

One day one hayku


Tessa bajó la mirada, entrelazó sus manos y se mantuvo en silencio, la respuesta y la salvación del mundo pendía de un hilo. En este caso, solo ella podía mantener ese hilo que colgaba en el vacío. Durante los minutos de silencio recordó los momentos más importantes en el transcurso de su vida. Por su cabeza pequeños fotogramas iban deambulando y sin ser apenas consciente el semblante serio quedó coronado por una sonrisa. —Supongo que acabas de encontrar respuesta a mi última pregunta, dijo Raskunn. —No estoy segura de ello, dijo Tessa. No tengo mucho que ofrecerte, pero te daría aquello que pidieras por salvarlos. —¿Hasta tú vida? —¿Quieres matarme? —Hay muchas maneras de poseer la esencia de la vida. No quiero matarte, tienes una mente valiosa... digamos que podrías salvar a la humanidad si renuncias a tu libertad.

Tessa clavó la mirada en sus manos temblorosas, jamás imaginó que en ese viaje ella se convertiría en la reina del inmenso tablero que era el planeta tierra. —El tiempo juega en tu contra Tessa. ¿Te quedarías conmigo?

Caos bajo control



Tessa cerró los ojos, recordó a su familia, escenas de abrazos y risas. Ya no quedaba nada de eso, su casa probablemente ya no era su casa. Sus padres ya no la esperaban, lo sabía desde que puso un pie en el escalón de la hipernave. Tessa solo dijo: -Si, Arcadia-1 modalidad crucero, despresurizar la escotilla de evacuación. Equipó su traje y los arneses para resolver defectos de forma manual en el casco del arcadia. Anclada a la hipernave por su cable, saltó al vacío para tener al guardián de frente. Rasskun no emitía palabra, solo una pulsión vibracional que extrañamente era captada por el radar de comunicaciones activo con la tierra. -Me quedaré. - gritó Tessa con la voz quebrada y el alma en sacrificio. Pero ¿a qué se refería con quedarse?. ¿Para qué? ¿Qué capricho cósmico es este? La onda vibracional la alcanzó, su cuerpo empezó a vibrar en la misma frecuencia. Sentía sus huesos crepitando, sus dedos comenzaron a escarcharse de un color verde esmeralda. Rasskun la estaba.. ¿transformando?

La estaba asimilando. Y en el proceso sintió la confluencia con su ser. Los instantes de vitrificación eran lapsus de sinapsis con la consciencia de Rasskun. Lleva eones recorriendo los golfos del espacio asimilando al mejor de cada raza. Observa la extinción de los planetas, aquel portador de valentía y astucia suficiente para impedir un colapso de escala planetaria. Se convierte en el candidato perfecto para ser asimilado. Este ente no es un guardián, es otra cosa, con un mecanismo de supervivencia primigenio. Asegura su existencia llevando al límite a las especies, en el velo de la omnipotencia cuántica, física y material. Carece de la pulsión de un ser vivo por luchar hasta las últimas consecuencias. Rasskun susurró en el último momento las coordenadas y Tessa las envió a los archivos de la nave con una última bocanada de aire por su comando de voz. "0-63-0/14-44-6" El pulso vibracional cesó, el corazón de Tessa igual, yace fundido en el todo.

La humanidad lleva años de preparativos y simulacros para el éxodo más allá de la heliopausa Las coordenadas están a 70009 años luz de distancia. Vivirán un tiempo en sus naves Colonia, los cálculos pronostican decenas de años en cápsulas de criogenización y estasis de sueño. Gracias a Tessa vivirán, la única humana con la determinación de subvertir el determinismo del universo.

Cayde

Relato escrito por Merath Kaiyo, Karma de Carmen, One Day One Hayku, Caos bajo control y Cayde.